La temporada de huracanes en el Atlántico, que muestra mayor actividad entre agosto y octubre, cuando ocurre el 95 % de los eventos, se ha fortalecido con la desaparición del fenómeno de El Niño en el Pacífico y ello hace aumentar la previsión de tormentas tropicales y ciclones.
La Administración Nacional de Océanos y Atmósfera de Estados Unidos (NOAA) predijo en su actualización del pronóstico un aumento del 30 % al 45 % de probabilidades de una actividad “por encima de lo normal”. En promedio la temporada de huracanes en el Atlántico produce 12 tormentas con nombre, de las cuales seis se convierten en huracanes, incluidos tres importantes.
Fuente: EFEverde